Pulsaciones

miércoles, 18 de mayo de 2011

DILE ADIOS


Dile adiós al odio, a las miradas envenenadas y las lenguas con veneno, dile adiós al desprecio, adiós a los celos, a la posesión por las personas, adiós al rencor, causado por algo que ya apenas recuerdas, adiós las mentiras maquilladas de verdades, adiós a los golpes de cerca y abrazos de lejos, adiós a las sonrisas que no hacen latir fuerte el corazón, adiós al vacío que dejas cuando marchas. Dile adiós a tu soledad, cámbiala por un día soleado de la mano de sonrisas sin fecha de caducidad, el aburrimiento se va a divertir.
Dame la mano, convierte lo blanco negro, haz que la luna salga por el día y el sol por la noche, muere cuando nazcas y vive cuando mueras, vamos ha hacer difícil la tabla del uno, vamos a quemarnos con lo frió y a congelarnos con lo caliente, vamos a decirle al cobarde que salve al mundo, vamos a decirle al valiente que se esconda, vamos a fumar para vivir mas tiempo, vamos a ser fiel compartiendo camas agenas, vamos a pedirle a los pobres limosna para dársela a los ricos, veremos como un hijo educa a su padre, y los alumnos son los que dan las clases, vamos a ver como es el maletin el que lleva al empresario, vamos a ver como el paciente opera al medico.
La verdad siempre quise cambiar todo esto un poco.
amalia.

sábado, 7 de mayo de 2011

Des-afortunada.


Ella, culta, no se echa la culpa de a ver nacido en un lugar donde se sepultan a millones de mujeres, donde la marabunta es algo rutinario, como la hora punta en el metro de Madrid. Se pregunta porque la insultan, piensa que es porque no conjunta o porque lleva adjunta su presunta etiqueta.
El, hambriento, desesperado por buscar alojamiento, y cansado porque yace ya sin aliento, dentro de ese cajero mugriento, ausente de miradas de libre pensamiento, pasa las horas recordando el dia de su nacimiento cuando las miradas eran sinceras y cortaban hasta el viento.
Yo afortunada, abrazada muy fuerte a mi corazonada de cambiar un poco esto, de tapar miradas con odio y cerrar bocas con veneno, aferrada a mi sueño, agarrada a mi tolerancia y sacrificada por construir sonrisas.
amalia.