calmaste mis miedos con besos en la nuca,
Calmaste mis malos sueños acariciándome el alma,
Calmaste mi impaciencia quemando todos los relojes que me sujetaban.
Quemaste el color negro y soplaste trayéndome mil regalos sin envolver,
Quemaste mis pesadillas y dibujaste en mi almohada tu olor a primavera.
Te metiste en mis adentros y cortaste la mala hierba.
amalia
Y es que hay personas que más que eso, te hacen sentir que son verdaderos ángeles de la sociedad.. Nunca existirán las palabras suficientes en el universo para explicar lo afortunadisima, especial y feliz que hacen sentir con su mera presencia.
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